Propósitos de año nuevo incumplidos en Mieres
2020 / 01 / 08 ( La Nueva España )
Ya llega el fin de año y es el momento de hacer recapitulación de la lista de propósitos que siempre intentamos cumplir, pero no somos capaces. En la política municipal de Mieres pasa algo parecido.
Todos los años nos prometemos que vamos a bajar de peso, casi siempre algo imposible por falta de esfuerzo y constancia. En el Ayuntamiento de Mieres pasa algo parecido, prometen que nos adelgazarán el peso de los impuestos, pero año tras año, no hacen más que subir. La falta de esfuerzo de IU por gestionar mejor el dinero conduce a que es más fácil decir que no se pueden bajar que hacer el esfuerzo. Los mierenses tendremos que seguir soñando con la posibilidad de que nuestros animosos ediles sean capaces de esforzarse algún día por facilitarnos una bajada real de la carga impositiva. Tenemos un ayuntamiento “demasiado obeso”, indolente y perezoso. Propósito fallido el de “bajar impuestos”.
También cada año prometemos estudiar más, pero como ello requiere hincar los codos, siempre encontramos mil excusas para no hacerlo: que no se dispone del tiempo, que se pasó el tiempo de matricularse, etc. En el Ayuntamiento de Mieres pasa igual, llevamos desde el año 2017 prometiendo una nueva titulación de Deportes para el Campus de Mieres y estamos en el 2020 sin nada. Es un tema que ha llenado una campaña electoral y, a la hora de la verdad, la de entablar una dura pelea por conseguir esa titulación, nos relajamos y nos excusamos de mil maneras. Durante los 3 años que llevamos de espera han surgido nuevas oportunidades, tales como los estudios de Energías Renovables o los de un futuro Grado de Materiales, pero tampoco peleamos por ellos. Esos serían grandes logros para Mieres. Pero, pelear por ellos parece que es un esfuerzo excesivo para los “estudiantes” de IU de Mieres, parece que ya estuvieran cansados de tanto “estudiar”.
Igualmente, cada año prometemos ser más limpios, nos cuidaremos más y haremos deporte, pero enseguida claudicamos ante el esfuerzo que todo ello requiere. El Equipo de IU adolece del mismo mal, nos hacen 2 podas de los caminos al año y a apañarse cada uno como pueda. Limpiamos Mieres para las elecciones en mayo y, cuando llega el verano, la dejadez se palpa ya en las calles. Prometemos apoyar el deporte y fomentarlo mientras estamos en elecciones, pero cuando hay que ponerse a trabajar de verdad, el esfuerzo lo solivianto con unas tristes subvenciones y me olvido del mantenimiento de las instalaciones. Mieres sigue sucio y nada de hacer deporte, que cansa mucho.
Así mismo, cada inicio de año prometemos tener mejores comportamientos ecológicos, que nos preocuparemos del planeta, pero a la hora de la realidad, separar la basura es un coñazo, ir en bicicleta fatiga y caminar, pudiendo ir en coche, cansa sobremanera. Al Equipo de Gobierno de Mieres pasa lo mismo: ¿para qué va a dar ejemplo el Ayuntamiento? Compramos autobuses diésel de paquete, de lo menos ecológico que hay; no tenemos carril bici que se pueda usar; nos van a subir la tasa de basura por no reciclar y, sobre todo, cada vez tendemos a tener basureros en lugar de contenedores. Tengo la impresión de que forma parte de nuestro ADN el pasado oscuro, contaminado y sucio de la época minera, y cuando unos dirigentes que no vivieron otra cosa que ese mundo, para ellos, la realidad que nos hacen vivir es perfecta. Mieres no será ecológico ni sostenible, y, de la limpieza, para dentro de 10 años hablamos.
Y, sin duda, cada año que empieza prometemos que trabajaremos más y que incluso, si es preciso, buscaremos una nueva empresa donde desarrollarnos profesionalmente o simplemente compraremos más en las tiendas de la ciudad y menos por internet. Pero, llegado el momento y la comodidad mata las buenas intenciones. Al Equipo de Gobierno le puede la comodidad. Comodidad para no buscar empresas que se instalen en Mieres, para ello habría que salir al “mundo”, indagar y negociar, todo lo cual requiere de un gran esfuerzo y capacidades que no hay. La comodidad de limitarse a ver cómo el paro baja sin que haga nada, pero no porque la gente encuentre empleo en Mieres, sino porque la gente emigra y se van. La comodidad de mantener “entretenido” el comercio local con un apoyo institucional mínimo, sin los esfuerzos que requiere emprender nuevas iniciativas o planificar un plan de comercio. La comodidad de excusarse por la sangría demográfica que sufre Mieres pensando en que ese es un problema que afecta a todos, el fácil consuelo de los tontos, cuando el problema es tan grande que requiere que se estrujen la cabeza nada menos que los quince concejales de IU. Mieres seguirá sin empresas, con un comercio local en declive y por debajo de los 38.000 habitantes y en caída libre.
En esta vida, para casi cualquier cosa hay una excusa, y para la lista de propósitos incumplidos por IU no podría ser menos. De replicar a esta esta reflexión, seguro que la culpa de los incumplimientos denunciados será siempre de los demás. Pero el calendario no miente, pues IU lleva gobernando en Mieres ya nueve años, tiempo durante el que Mieres ha padecido y sigue padeciendo el incumplimiento de tantas promesas hechas, cuyo resultado lógico es un declive imparable en todos los órdenes.
Comienza un año nuevo y estamos en momentos de buenos propósitos. ¿Seguirá IU igual que los nueve años precedentes, olvidándose en seguida de sus buenos propósitos para la mejora sustancial que Mieres necesita? Por cierto, para terminar, Señor Alcalde, ¿Qué tal dejar de fumar como propósito? para cumplirlo igual que lo que necesita Mieres.