La cuenta de la lechera y el concejal de Cultura
2019 / 01 / 03 ( La Nueva España )
La cuenta de la vieja, como denominaban a los cálculos que hacia María Josefa de Borbón, era clara sencilla y fácil de entender; nada que ver con las que hace el Concejal de Cultura (el señor Ponte) con el centro Cultural de Liberbank. Eso, o nos está tomando el pelo a todos los Mierenses.
En el Partido Popular tenemos clara la respuesta: pura megalomanía, propaganda personal y demostración de poder del concejal de Cultura buscando una notoriedad costeada por las arcas públicas.
Resulta cuando menos esperpéntico que en el engolamiento que demuestra en su labor municipal sea capaz de contradecir y ocultar incluso los propios informes de los técnicos municipales en los expedientes que el mismo incoa como el del arrendamiento del Centro Cultural de Liberbank por parte del Ayuntamiento.
Imaginamos la intención real de este concejal al tratar de engañar a la gente negando que el coste anual aproximado para el mantenimiento de este Centro supondrá unos 75.000€. Trata, sin duda, de seguir gastando sin medida alguna en su área para poder mantener la cultura sectaria y de adoctrinamiento a la que nos tiene acostumbrados, y que por el escaso interés de algunos actos programados a la mayoría acude muy poca gente, incluso en algunos de ellos no llega ni a la docena de espectadores.
El Partido Popular no se saca las cifras de la manga. El señor Ponte debería leer al menos los informes que constan en el expediente del arrendamiento de dicho Centro Cultural. De esta forma no desmentiría el informe del Director de la Casa de la Cultura incluido en el mismo donde se consigna el gasto que puede generar un equipamiento de estas características,
Cifrándolo en 72.950€ en diciembre de 2017, confirmado por la técnica del Negociado de Patrimonio en su informe de junio de 2018.
Pero realmente no ha de extrañarle a nadie que el Sr. Ponte ni lea ni tenga en consideración cualquier escrito que no salga de su mano porque ello supondría asumir alguna idea o proyecto ajeno, a lo cual no está acostumbrado.
Para justificar este alquiler el Alcalde y su Concejal aducen que hacen falta locales para talleres, exposiciones y otras actividades, olvidándose de que tenemos locales propios en desuso o prestados a otras entidades.
Haciendo memoria, el Concejo de Mieres cuenta con cinco salones de actos en edificios municipales, junto con una decena en Institutos, colegios y Centros de Mayores y Casa de Encuentro de la Mujer; así como algún otro de organismos públicos autonómicos como los de la Universidad,a la que unas veces queremos potenciar y otras se nos olvida.
Sólo los gestionados directamente por el Ayuntamiento ofrecen aforos diferentes para poder cubrir la demanda de actividades propias y sumar a estas las múltiples organizadas por asociaciones y entidades del concejo.
De igual forma podríamos hablar de las pinacotecas municipales, con dos abiertas al público y una tercera cedida a Proyecto Hombre para un fin distinto al establecido cuando se recuperó la Casa Duró (cerrada en su momento argumentando que era costoso su mantenimiento).
Es curioso que este Equipo de Gobierno se dedique a mantener y abrir locales de entidades privadas (en este caso de un banco a los que les falta tiempo para demonizar) y algunos de los propios los tenga abandonados.
Todas las instalaciones municipales le parecen pocas al Equipo de Gobierno y a su Concejal de Cultura, y optan sin tener en cuenta que determinadas necesidades especiales podrían cubrirse con alquileres puntuales de espacios y salones en la Universidad o en el propio centro de Liberbank, lo que resultaría bastante menos gravoso para las arcas municipales, pudiendo con el ahorro que ello supondría aplicar recursos para la mejora de nuestras instalaciones culturales o para la puesta en marcha de más actividades culturales atractivas para los vecinos.
Es curioso que para esto no se rompa el techo de gasto y para otras tan necesarias en nuestro municipio argumenten que sí.
Po ello, en el Partido Popular creemos que nuestro municipio tiene muchos problemas sin resolver como mejorar la limpieza, modernizar las instalaciones deportivas, bajar los impuestos a nuestros ciudadanos y hacer políticas que ayuden y atraigan a empresarios y emprendedores a nuestro concejo para generar empleo y fijar población, antes que costear la megalomanía, el autobombo y el sectarismo cultural en el que el actual Concejal de Cultura el señor Ponte nos tiene sumidos. Éstas son sus políticas y así esta Mieres.
Lito Rodríguez
Presidente del PP de Mieres