Hasta siempre, amigo Aníbal
2023 / 11 / 30 ( La Nueva España )
Hace casi 2 semanas que te has ido, y es la primera vez que me encuentro con ánimo para poder dedicarte unas palabras mediante una carta. No debiste haberte ido de esta vida tan pronto, cuando aún tenías sólo sesenta y ocho años, y tenías una familia y un entorno que tenían todo el derecho del mundo a disfrutar de ti un poco más.
Al menos, si desde algún lugar puedes leerme, déjame decirte que te fuiste a lo grande. Toda tu familia, tanto la real, como la política, cumplieron y dejaron bien alto tu pabellón, ellos sabían que eso de “la familia no recibe” no iba contigo, y desde aquí quiero agradecerles el esfuerzo de atender a todos y cada uno de los miles de vecinos que quisieron mostrarles sus respetos. Nuestros tiempos de debates políticos pasaron cuando allá por 2019, di paso a un nuevo grupo municipal que intentase lo que yo no pude, que el Partido Popular consiguiera ganarte la Alcaldía o al menos mejorar nuestros resultados en Mieres.
Me gustaría recordar, como la noche electoral de 2011, en la que nosotros perdimos representación municipal, y tú conseguías duplicar la de Izquierda Unida, como conteniendo la euforia de lo que alguno llamó el “Anibalazu”, te acercaste a mi familia, repartiste besos y abrazos, e insuflaste ánimos a quien aquel día no tuvo su mejor noche política.
Debatimos, incluso podría decir que alguna vez discutimos, (las que menos), en el mandato que más estuvo marcado por la crisis económica, máxime en Mieres con la situación particular de este Consistorio, la 2.011 – 2.015, un mandato duro, en el que se tomaron decisiones contundentes en todas las administraciones públicas. Quienes hemos sido fumadores, a veces medimos la distancia en cigarros, y recuerdo perfectamente la cantidad de veces que la confrontación nos duraba un cigarro, hasta que volvíamos a hablar de lo divino y lo humano, de cuestiones personales, y de cuestiones que únicamente te competían a ti como Alcalde, pero que confiabas compartirme previamente.
Crecimos juntos en política, pero más allá de un adversario político eras un amigo que estuvo ahí cuando más te necesité personalmente, y prueba de ello fue el gran apoyo que fuiste a finales de 2.014. A sólo seis meses de las elecciones, yo me hacía con la presidencia del PP de Mieres, y un reducido grupo de militantes que me veían como una amenaza para sus aspiraciones políticas, decidieron llenar de anónimos las redacciones de los periódicos, con gravísimas acusaciones de las que nunca logré resarcirme (mención aparte haré después a otras). Cualquier otro Alcalde de los 8.000 municipios de España, se habría sumado a esa ola de falsedades para aniquilar a quien sería su rival en las elecciones municipales medio año después. Pero tú eras especial, me fuiste a buscar a mi despacho, del que ninguna gana tenía de salir, y caminaste conmigo por las calles más concurridas de Mieres para trasladarme tu apoyo ante todo el mundo.
Aunque de gravísimas acusaciones falsas no voy a darte lecciones ahora, ya que apenas cuatro años después te tocó el turno a ti. Me imagino, y sé lo que sufriste tú y tu familia, imagino que los que perpetraron aquella salvajada no tengan ahora la conciencia muy tranquila, y me gustaría imaginar un mundo donde la crítica política sea respetada y libre, pero acusaciones tan graves se sostengan en pruebas palpables y demostrables y no en meras suposiciones o falsedades, para luego quedar impunes, pero con un daño moral, familiar y social difícil de superar.
Me reconfortó, en cierta manera, que la Vicepresidenta Yolanda Díaz se acordase de ti en el Congreso de los Diputados, porque tu figura trasciende lo ideológico, pero en mis adentros sentía la satisfacción de que a ese “desconocido” para los españoles que citaba Yolanda Díaz, el único parlamentario que lo conoció de verdad, fui yo. Los creyentes tenemos fe en que más allá hay un lugar mejor, en el que algún día seguiremos tomando un café o debatiendo. Hasta siempre, amigo.
José Manuel Rodríguez "Lito"
Presidente PP Mieres y Senador